Jorge Alvarado Galicia, ex delegado en Milpa Alta traicionó en 2018 al PRI que lo postuló al cargo e impuso vía Movimiento Ciudadano al actual gobernante, Octavio Rivero Villaseñor, su socio. Los priistas quedaron furiosos.
Ahora, los priistas milpaltenses no olvidan la afrenta y están en pie de lucha, sobre todo si el clan Alvardo recibe la candidatura tricolor a la alcaldía.
El priismo denunción que los Alvarado presumen que ya compraron la candidatura tricolor en cinco millones de pesos, los cuales habrían entregado al dirigente del PRI en la CDMX. Eso los puso en guardia.
Asimismo, en diciembre pasado le exigieron al dirigente nacional del tricolor, Alejandro Moreno, la expulsión del clan Alvarado por traicionar al partido y a los gobernados de Milpa Alta por la abierta corrupción y mal gobierno.
En su gestión, aseguran, los abusos y el cinismo fueron el sello de la casa.
Por otra parte, Alvarado Galicia, sostuvo en su gestión un tórrido romance con Mariana Moguel Robles, hija de Rosario Robles, hoy en desgracia, quien era diputada local priista gracias a las influencias de la madre.
Alvarado Galicia estaba loco de contento porque además gozaba de la poderosa protección de la hoy habitante del reclusorio de Santa Martha Acatitla.
Las borracheras de Alvarado con Marianita fueron de época.
La Moguel quería ser alcaldesa en esa demarcación y no le alcanzó. Hoy la moneda está en el aire pero el PRI en Milpa Alta podría estallar en pedazos si se impone el clan Alvarado.