• Con Nitá y Maya suman ocho variedades inscritas por el EdoMéx ante el Servicio Nacional de Inspección y Certificación de Semillas.
• Los floricultores pueden acceder a estos tipos de rosa mediante el programa Transformando el Campo, que entregará hasta mil yemas sin pagar regalías.
METEPEC, Estado de México.- El Gobierno de la Maestra Delfina Gómez Álvarez, a través de la Secretaría del Campo, registró dos nuevas variedades de rosas ante el Servicio Nacional de Inspección y Certificación de Semillas (SNICS), estas cuentan con potencial comercial por su resistencia a plagas y adaptabilidad a distintos climas.
Se trata de las variedades denominadas Nitá y Maya, con estas nuevas especies, suman ocho tipos de rosas mexiquenses registradas ante el SNICS, dependiente de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader).
El Estado de México es el primer productor de flores en el país al cultivar más del 70 por ciento del total nacional. Nitá, de color blanco, y Maya, de color rosa, se incorporan a las variedades Miltañety, Pureza, Grandeza, Magi-k, Jiasu y Juesi, disponibles para los productores del Estado de México.
Durante la entrega de los títulos de obtentor de dichas variedades vegetales, María Eugenia Rojano Valdés, Secretaria del Campo del Estado de México, aseveró que estas rosas estarán a disposición de los floricultores mexiquenses próximamente en el Centro de Innovación Florícola (Ciflor) de Villa Guerrero.
Explicó que entre las ventajas para los floricultores al usar las variedades desarrolladas por este centro se encuentran la disminución del pago de regalías por las semillas importadas y la mejora en la rentabilidad de estas nuevas variedades.
Rojano Valdés indicó que los floricultores pueden acceder a estas variedades a través del programa Transformando el Campo, que entregará hasta mil yemas sin pagar regalías y en caso de ocupar más, el costo por regalías es mucho más bajo que las variedades importadas.
Leovigildo Córdova Téllez, titular del SNICS, explicó que, de todas las variedades de rosa registradas, las ocho variedades mexiquenses son las únicas a nivel nacional, lo que reduce los costos de producción.
“Las variedades que se generan deben ser pensadas con la finalidad de que lleguen al mercado, que lleguen a los usuarios, si no tenemos variedades que gusten a los usuarios, prácticamente no hay negocio”, expresó el titular del SNICS.